lunes, 19 de diciembre de 2016

Sobre la creación de la Licenciatura en Turismo en la Facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la Universidad Nacional de Rosario


En la segunda quincena de noviembre ingresó al temario del CD de nuestra Facultad el tratamiento de una iniciativa de creación de una carrera de Licenciatura en Turismo. El proyecto, que incluía una propuesta de plan de estudio y un reglamento de funcionamiento, lo presentó la Decana de la Facultad como un trabajo conjunto con la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales y fue explicado en la comisión de Enseñanza por el Secretario de Relaciones Internacionales Mg. Javier Ganem y por la Cont. Adela Puig (directora de la carrera de Especialización de Posgrado Empresas y Emprendimientos Turísticos). En la exposición del Secretario alentó el tratamiento acelerado de la iniciativa e invitó a producir despacho en un breve trámite para poder converger con la secuencia de avance del mismo proyecto en la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales. Esta sugerencia sorprendió a los consejeros docentes de T P y P[1] que no se mueven al compás del oficialismo.
Se invocó el apoyo del Rector y su Secretario de Economía y Finanzas, por lo que consultamos a este último, quien nos afirmó la satisfacción del rector por el trabajo conjunto y, ante el interrogante acerca del reclamo presupuestario correlativo, respondió que el mismo dependerá de la evaluación que haga del plan de estudios el Consejo Superior de la UNR y las oficinas correspondientes de la Secretaría de Políticas Universitarias.  A pesar de la cerrazón de algunos de sus colaboradores, la Decana inteligentemente accedió a evitar el tratamiento exprés, y coincidió en habilitar una comisión especial ad hoc para analizar el plan de estudio y el reglamento de funcionamiento, pero reclamó la declaración de necesidad de creación de la carrera en la Facultad.
Los consejeros de T P y P advertimos las implicancias que tiene afirmar lo reclamado en el funcionamiento de la casa, y en su futuro, como para comprometerse en la firma de cheques en blanco de este tipo. El tratamiento de la currícula sin las definiciones previas insoslayables propone evitar la discusión de aristas fundamentales como las que se exponen seguidamente: 
a)      Necesidad de creación de la carrera: Nunca debe ignorarse que quien financia los proyectos es finalmente el pueblo argentino; es una responsabilidad de la universidad de al menos discutir, aunque sea brevemente, los beneficios y costos del proyecto. Se señala a este paso como argumento de dilación en la discusión. ¿Es realmente algo caprichoso detenerse algún tiempo en ello o en todo caso es una falencia del proyecto presentado?
b)      Es cierto que hay una falencia en la oferta del máximo nivel de educación en materia de  carreras de Turismo en nuestra ciudad; pero existen numerosas carreras terciarias en nuestra región, algunas de gestión pública y otras de gestión privada a las que convendría articular en un postítulo/ciclo de complementación curricular, como otras experiencias positivas que se ofrecen en nuestra casa. Este debiera ser un camino a explorar y contaría con probable apoyo público dado que posibilitaría la diversificación de la oferta de matrícula y su descentralización. Se aduce la diferencia de niveles y se desestima el debate sobre este punto endilgándole , otra vez, un carácter totalmente dilatorio. ¿Le parece que el debate de este punto puede saltearse livianamente en un ámbito universitario?
c)       Incumbencias profesionales del egresado: También se ha evitado tratar debidamente las habilitaciones profesionales del futuro graduado en Turismo. Increíblemente se ha tratado de convencer a los consejeros de lo innecesario de consultar al Consejo Profesional (Cámara II) o el Colegio de Graduados en Ciencias Económicas. Recordemos que estas instituciones contribuyen con el sostenimiento de nuestra casa de estudios y recogen la experiencia de nuestros egresados en la vida profesional. ¿También consultarlos es “ganar tiempo” para bloquear un proyecto, no resultará esta acusación una proyección del inconsciente colectivo que domina el gobierno de la casa?
d)      Experiencias de otras Universidades: En el proyecto no se acompaña información alguna sobre la experiencia aquilatada en otras universidades sobre los estudios de esta orientación. Hay carreras con esta terminalidad en varias Universidades, las cuales deberían examinarse al menos con una breve referencia comparativa. ¿Es posible “ahorrar tiempo” en estas consideraciones cuando el mismo Consejo Interuniversitario Nacional no reconoce la carrera proyectada como de “la familia de Ciencias Económicas”
e)      Revista de docentes y alumnos: ¿Cuál va a ser el status de los docentes a cargo de cátedras? ¿Serán parte del plantel de Ciencias Económicas o Ciencias Políticas? ¿En qué unidad académica se instalaría la dirección? ¿Va a ser extendido a las Sedes los cursos de esta Licenciatura?
f)       Presupuesto de atención de la carrera. ¿Va a ser soportado por ambas facultades? Esto se extiende a la provisión de cargos directamente imputables a las cátedras y también  a los servicios indirectos que se incorporan. La Universidad Nacional de Rosario acaba de salir de dificultades financieras serias superadas con mucho esfuerzo de toda la comunidad en el ejercicio próximo a finalizar. ¿Es hora entonces de comenzar con proyectos que conllevan seguramente demandas de ampliación y un esperable “rosario de quejas” si no se satisfacen en la medida suficiente? Volvemos a expresar este proyecto no se financia con el bolsillo de los inspiradores sino con los de todos los ciudadanos argentinos que en el variado espectro de la tributación contribuyen a su sostenimiento
g)      ¿Cuál es el estado de atención de las actuales carreras? ¿Existe satisfacción en la cobertura de los servicios? ¿No habría que reclamar, una declaración de satisfacción con la oferta actual de servicios docentes por parte de las actuales autoridades, como propone el proyecto de T P y P? Haber omitido la inclusión en la propuesta oficialista, luego de haberla admitido en pos de una anuencia de nuestro bloque para con la declaración proyectada, insinúa una renuncia a responsabilidad futura en conflictos que eventualmente pueda disparar la aparición de restricciones a la correcta atención de los cursos actualmente en funcionamiento. 
Por lo expuesto los docentes de Transparencia, Participación y Pluralismo abajo firmantes reafirman su responsabilidad en reclamar mayor discusión en la creación de carreras en nuestra facultad y reivindican su definición de no apoyar presurosas e injustificadas vías para adoptar compromisos cuyos alcances no han sido debidamente medidos. Agradecemos asimismo a los consejeros de Agrupación Manuel Belgrano, y de Franja Morada, dos agrupamientos estudiantiles de probada trayectoria reivindicativa e histórica vinculación con la Universidad Pública Gratuita y abierta, el acompañamiento en la votación donde lamentablemente se impuso la declaración acelerada del proyecto. 
Finalmente deploramos las declaraciones desaprensivas de algunos docentes que, en sus alocuciones en el cuerpo, adjetivaron despectivamente a los opositores develando una intolerancia absolutamente inadmisible en el marco de la constante ampliación de libertades y derechos que supone el proceso reformista en la Universidad Argentina.


CONSEJEROS DOCENTES T P Y P:   L. VAUDAGNA   -    T. DÍAZ    -    M. PRIOTTI   -  L. SEVERINO




[1] TP y P siglas abreviadas de Transparencia Participación y Pluralismo 

sábado, 17 de diciembre de 2016

Fallecimiento del Dr. Walter A.R. Perino.

Palabras recordatorias del Cont. Edmundo Virgolini
El pasado 03 de diciembre nos dejó después de privilegiarnos con su trato en este mundo el inestimable colega, compañero, amigo  y maestro Dr. Walter Alfredo Ramón Perino. Debo reiterar lo que he dicho muchas veces: ha sido una  persona que inspiró mucho de lo que pude haber transitado de bueno en esta vida de trabajador y ciudadano de la Universidad Nacional de Rosario.
Hace poco más de dos años cuando nuestra Universidad lo distinguiera con el titulo de doctor “honoris causa”  tuve oportunidad de dirigir la palabra introduciendo el acto de otorgamiento de dicho reconocimiento. Dije entonces entre otras cosas que me salían literalmente del corazón:

“Privilegio que me da la vida participar en la entrega del doctorado Honoris causa al querido amigo Walter. Y es un acto de justicia esta distinción dado que como decía José Ingenieros:
“El rango solo es justo como sanción del mérito”, y agregaba el insigne “maestro” en las “Fuerzas Morales”: “..porque el rango se recibe, es adventicio y su valor fluctúa con la opinión de los demás, pues necesita la convergencia de sanciones sociales que le son extrínsecas; en cambio el mérito se conquista, vale por sí mismo y nada puede amenguarlo, porque es una síntesis de virtudes individuales intrínsecas”.
Porque así es este título para Walter tan merecido como el académico que ya obtuvo antes. Es un colofón este justo homenaje a una conducta forjada con la coherencia. Comportamiento que promueve una constelación de valores;  valores que deben acrisolarse , difundirse. y preservarse en esta instancia democrática: Hoy que la cooperación cede terreno a la competencia de todo tipo halla al tránsito de Walter por esta institución una vara de medida para la instancia democrática: hablo del desinterés personal, el desprendimiento y  la transparencia en la acción. Cualquiera que haya conocido a Walter puede confirmar mis dichos. Me consta que pudo aprovecharse del poder y ni lo pensó por el contrario lo ejerció con absoluta generosidad y hasta algunos amigos nos dirían con cierta “ingenuidad democrática”
Pero no era “ingenuidad” era “docencia”. Es que atravesábamos  una época singular que solo los que estuvimos allí recordamos .  El  amplio gozo de reencontrarnos con las instituciones. Y el modo de vida de la democracia. Nos tocó en ese momento conocernos en como se dice ahora … la gestión. Para nosotros no fue nunca  eso de administrar calcular y  tejer. La misión que reconocimos era  proponer una universidad abierta, plural, libre y jerarquizada. Abjurábamos del elitismo, el limitacionismo  y el cientificismo pero abrazábamos  la seriedad, la responsabilidad   y el compromiso con el  saber
Puedo mencionar a algunos de los amigos que estuvimos en esa tenida: Ernesto Seselovsky, Sergio Di Pietro. los desaparecidos y extrañados Héctor Lazzarini , José María Masuelli y Humberto De Vita. Y otros tantos más  académicos de trayectoria en la docencia universitaria que rápidamente acudieron a la convocatoria normalizadora
Con Ernesto y Sergio, sus  amigos entrañables ni bien se instalaron las instituciones democráticas en diciembre de 1983 renunciaron a sus concursos poniendo sus cátedras a disposición de las autoridades  de la joven democracia universitaria. Algún novel dirigente, más tarde  muy destacado,  me comentó “Caso único en la Universidad Argentina”.  Cierto es que hubo  algunos más pero fueron muy pocos.
Para Walter se avecinaba una época de sacrificio.  Es que asumía su rol en el momento era servir a la Universidad y no servirse de ella. Podríamos decir que perfilaba una ejemplaridad democrática. Aquello de jugarse y quedarse sin nada más que el honor de haber servido a la construcción de la República. Lo sufrió y lo disfrutó porque era su sueño de radical y de reformista
Quiero concluir que para mí fue una conjunción casi diría yo, con el respeto a la Universidad que este discurso supone : “astral”. Se “alinearon los planetas” para que  este humilde servidor fuera honrado con integrar el Gobierno de Walter en la normalización universitaria de 1984. Marcó mi vida al instalar variantes de comportamiento que mantengo como compromiso de honorabilidad. Respetó a las carreras, no “fabricó” las de nadie. Ayudó a todos los que pudo sin edificar puentes académicos que atraviesan y  “pasan por arriba” de otros. Concursó su cátedra en la Facultad luego de haber dejado el gobierno casi tres años después.
En definitiva fue un ejemplo que merece ser reconocido especialmente en estos momentos donde la calculadora desplaza los ideales y la eficiencia electoral barre la generosidad y la independencia de criterio. Sin estas referencias fundamentales es imposible asomarse al camino de construcción de una universidad expresiva de los cánones reformistas”.

Quiero aclarar que por suerte pude expresar todo este sentimiento de admiración y respeto en vida del Dr. Perino y propiciar con posterioridad  una instancia cual fue la posterior formación de este Movimiento por la Transparencia la Participación y el Pluralismo que tuvo en el legado de Walter una de sus más ricas fuentes de inspiración. Por eso maestro y amigo Walter Perino siempre serás recordado  por los que amamos el conocimiento, y  la vigencia indispensable de la “libertad creadora” en la Universidad. Muchas gracias amigo Walter.