En la segunda quincena de
noviembre ingresó al temario del CD de nuestra Facultad el tratamiento de una
iniciativa de creación de una carrera de Licenciatura en Turismo. El proyecto,
que incluía una propuesta de plan de estudio y un reglamento de funcionamiento,
lo presentó la Decana de la Facultad como un trabajo conjunto con la Facultad
de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales y fue explicado en la
comisión de Enseñanza por el Secretario de Relaciones Internacionales Mg.
Javier Ganem y por la Cont. Adela Puig (directora de la carrera de
Especialización de Posgrado Empresas y Emprendimientos
Turísticos). En la exposición del Secretario alentó el tratamiento
acelerado de la iniciativa e invitó a producir despacho en un breve trámite
para poder converger con la secuencia de avance del mismo proyecto en la
Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales. Esta sugerencia sorprendió
a los consejeros docentes de T P y P[1]
que no se mueven al compás del oficialismo.
Se invocó el apoyo del Rector y
su Secretario de Economía y Finanzas, por lo que consultamos a este último,
quien nos afirmó la satisfacción del rector por el trabajo conjunto y, ante el
interrogante acerca del reclamo presupuestario correlativo, respondió que el
mismo dependerá de la evaluación que haga del plan de estudios el Consejo
Superior de la UNR y las oficinas correspondientes de la Secretaría de Políticas
Universitarias. A pesar de la cerrazón
de algunos de sus colaboradores, la Decana inteligentemente accedió a evitar el
tratamiento exprés, y coincidió en habilitar una comisión especial ad hoc para
analizar el plan de estudio y el reglamento de funcionamiento, pero reclamó la
declaración de necesidad de creación de la carrera en la Facultad.
Los consejeros de T P y P advertimos
las implicancias que tiene afirmar lo reclamado en el funcionamiento de la casa,
y en su futuro, como para comprometerse en la firma de cheques en blanco de
este tipo. El tratamiento de la currícula sin las definiciones previas
insoslayables propone evitar la discusión de aristas fundamentales como las que
se exponen seguidamente:
a) Necesidad de creación de la carrera: Nunca debe
ignorarse que quien financia los proyectos es finalmente el pueblo argentino; es
una responsabilidad de la universidad de al menos discutir, aunque sea brevemente,
los beneficios y costos del proyecto. Se señala a este paso como argumento de
dilación en la discusión. ¿Es realmente algo caprichoso detenerse algún tiempo
en ello o en todo caso es una falencia del proyecto presentado?
b) Es cierto que hay una falencia en la oferta del
máximo nivel de educación en materia de carreras de Turismo en nuestra ciudad;
pero existen numerosas carreras terciarias en nuestra región, algunas de
gestión pública y otras de gestión privada a las que convendría articular en un
postítulo/ciclo de complementación curricular, como otras experiencias
positivas que se ofrecen en nuestra casa. Este debiera ser un camino a explorar
y contaría con probable apoyo público dado que posibilitaría la diversificación
de la oferta de matrícula y su descentralización. Se aduce la diferencia de
niveles y se desestima el debate sobre este punto endilgándole , otra vez, un
carácter totalmente dilatorio. ¿Le parece que el debate de este punto puede
saltearse livianamente en un ámbito universitario?
c) Incumbencias profesionales del egresado: También se
ha evitado tratar debidamente las habilitaciones profesionales del futuro
graduado en Turismo. Increíblemente se ha tratado de convencer a los consejeros
de lo innecesario de consultar al Consejo Profesional (Cámara II) o el Colegio
de Graduados en Ciencias Económicas. Recordemos que estas instituciones
contribuyen con el sostenimiento de nuestra casa de estudios y recogen la
experiencia de nuestros egresados en la vida profesional. ¿También consultarlos
es “ganar tiempo” para bloquear un proyecto, no resultará esta acusación una
proyección del inconsciente colectivo que domina el gobierno de la casa?
d) Experiencias de otras Universidades: En el proyecto
no se acompaña información alguna sobre la experiencia aquilatada en otras universidades
sobre los estudios de esta orientación. Hay carreras con esta terminalidad
en varias Universidades, las cuales deberían examinarse al menos con una breve
referencia comparativa. ¿Es posible “ahorrar tiempo” en estas consideraciones
cuando el mismo Consejo Interuniversitario Nacional no reconoce la carrera
proyectada como de “la familia de Ciencias Económicas”
e) Revista de docentes y alumnos: ¿Cuál va a ser el
status de los docentes a cargo de cátedras? ¿Serán parte del plantel de
Ciencias Económicas o Ciencias Políticas? ¿En qué unidad académica se
instalaría la dirección? ¿Va a ser extendido a las Sedes los cursos de esta
Licenciatura?
f) Presupuesto de atención de la carrera. ¿Va a ser
soportado por ambas facultades? Esto se extiende a la provisión de cargos
directamente imputables a las cátedras y también a los servicios indirectos que se incorporan.
La Universidad Nacional de Rosario acaba de salir de dificultades financieras
serias superadas con mucho esfuerzo de toda la comunidad en el ejercicio
próximo a finalizar. ¿Es hora entonces de comenzar con proyectos que conllevan
seguramente demandas de ampliación y un esperable “rosario de quejas” si no se
satisfacen en la medida suficiente? Volvemos a expresar este proyecto no se
financia con el bolsillo de los inspiradores sino con los de todos los
ciudadanos argentinos que en el variado espectro de la tributación contribuyen
a su sostenimiento
g) ¿Cuál es el estado de atención de las actuales
carreras? ¿Existe satisfacción en la cobertura de los servicios? ¿No habría que
reclamar, una declaración de satisfacción con la oferta actual de servicios
docentes por parte de las actuales autoridades, como propone el proyecto de T P
y P? Haber omitido la inclusión en la propuesta oficialista, luego de haberla
admitido en pos de una anuencia de nuestro bloque para con la declaración
proyectada, insinúa una renuncia a responsabilidad futura en conflictos que
eventualmente pueda disparar la aparición de restricciones a la correcta
atención de los cursos actualmente en funcionamiento.
Por lo expuesto los docentes de Transparencia, Participación y
Pluralismo abajo firmantes reafirman su responsabilidad en reclamar mayor
discusión en la creación de carreras en nuestra facultad y reivindican su
definición de no apoyar presurosas e injustificadas vías para adoptar
compromisos cuyos alcances no han sido debidamente medidos. Agradecemos
asimismo a los consejeros de Agrupación Manuel Belgrano, y de Franja Morada,
dos agrupamientos estudiantiles de probada trayectoria reivindicativa e
histórica vinculación con la Universidad Pública Gratuita y abierta, el
acompañamiento en la votación donde lamentablemente se impuso la declaración
acelerada del proyecto.
Finalmente deploramos las declaraciones desaprensivas de algunos
docentes que, en sus alocuciones en el cuerpo, adjetivaron despectivamente a
los opositores develando una intolerancia absolutamente inadmisible en el marco
de la constante ampliación de libertades y derechos que supone el proceso
reformista en la Universidad Argentina.
CONSEJEROS DOCENTES T
P Y P: L.
VAUDAGNA - T. DÍAZ
- M. PRIOTTI - L.
SEVERINO